Se trata de erradicar la violencia y la discriminación contra las mujeres, así como de asegurar que tienen las mismas oportunidades que los hombres en todos los ámbitos de la vida. Esto significa acabar con todas las formas de violencia contra las mujeres, incluida la explotación sexual.

Este ODS también nos impulsa a trabajar para la igualdad de mujeres y hombres en el ámbito laboral y combatir la discriminación salarial, así como promover la conciliación de la vida personal, familiar y laboral.

Hay que trabajar por el reconocimiento y el reparto de los cuidados y del trabajo en la esfera familiar. Finalmente, también se ha de velar por la participación plena y efectiva de las mujeres, y por la igualdad de oportunidades en el liderazgo de la vida pública.